jueves, 7 de julio de 2016

Relación Sumaria: 4 al 7 de julio de 1599

Tras la derrota del ejército invasor que se adentró hacia el centro de la isla, los naturales vuelven  tomar la ciudad de Las Palmas, con edificios en llamas y vacía. Los invasores, embarcados, aún amenazan...

Arcos procedentes del Monasterio de Santo Domingo, incendiado por los holandeses. Hoy en la “Casa de Colón”. Fotografía propia.



[...] donde el dicho dia Domingo quatro de Julio por la mañana, luego que entraron apagaron el fuego de San Francisco, que no se quemó mas que la Yglesia, y otras casas, y particularmente en el peso de la harina que se empeçava a arder, y por allí se quemavan los graneros del Pósito, y la casa del Audiencia y acuerdo, y las del Cabildo, y Carcel alta y baxa, y también se apagó el fuego en la plaza, hazia las casas donde bivia el señor Regente, de modo que obra de treynta y quatro casas quemaron, y casi la mitad eran de tortas de barro y de poco valor. Luego que los naturales quedaron señores de la ciudad, el dicho dia quatro de Julio Domingo por la mañana, los señores Regente y Oydores, con graves penas mandaron que viniesse toda la gente que quedava en el campo a la Ciudad, y mandaron traer bastimentos por no aver quedado ningunos en la Ciudad, y se tapiaron las puertas de las murallas, y hizo cuerpo de guardia, y pusieron postas y centinelas hasta en el propio Puerto donde estava la Armada del dicho enemigo fuera aunque estos quatro dias que el enemigo estava embarcado, solto de los prisioneros con que[?] embió a pedir los presos de su nacion que tenía la Inquisicion, y que luego se yría, donde no, que avía de tornar a desembarcar, y entrar en la ciudad, y quemalla toda, desde la mejor hasta la mas pobre casa, y las Yglesias que se quedavan, y la mayor, la avia de derribar y correrles rodala tierra y pueblos, y hazer lo propio en las sementeras, y passar a cuchillo a toda la gente que prendiesse.

No se les embió respuesta ninguna, antes se mando por los dichos señores y el dicho Licenciado Chamoso con graves penas, que ninguno bolviesse ni fuesse a hablar con el, y estos dias fue muy mucho lo que trabajo el Licenciado chamoso por su persona, de dia y de noche, acudiendo con mucho cuydado a todas partes, y consultando con los dichos señores Regente y Oydores todas las cosas que se avian de hazer para aquella ocasion.